Si está notando que su pareja o una persona cercana a usted tiene problemas de trabajo, salud, familia, finanzas, relaciones, comportamiento social, asuntos legales, autoestima o respeto a sí mismo, usted NO está exagerando en su reacción ante su consumo de sustancias.
Si una persona continúa consumiendo sustancias a pesar de que esa conducta está causándole problemas, eso es un problema en sí mismo. Muestra que el consumo de sustancias se ha vuelto más importante que los problemas que está causando. El hecho de que alguien que no esté dispuesto a hablar sobre el tema o que se niegue a considerar que podría tener un problema es un fuerte indicador de que sí existe un problema.
Las películas, los libros y las revistas suelen mostrar que las personas deben “tocar fondo” antes de que se les pueda ayudar. Esta idea es un mito. Las personas no necesitan tocar fondo para recibir ayuda. Las investigaciones demuestran que la identificación temprana del problema es una solución mucho más eficaz para los problemas de consumo de sustancias.
La identificación temprana se produce ante los primeros signos de un problema, antes de que alguien haya sufrido un evento traumático, haya abandonado la escuela o haya perdido relaciones importantes, empleos, salud o autoestima.
La identificación puede hacerse mediante una evaluación realizada por un profesional de la salud, un profesional de asistencia al empleado, o un familiar. Lo que sucede después de la evaluación depende de los resultados de la prueba. Algunas personas pueden aprender a reducir el consumo, mientras que otras necesitan una evaluación adicional y un posible tratamiento.
En general, las personas tienen más capacidad para enfocarse en su recuperación si su problema de consumo de sustancias se descubre y enfrenta a tiempo. El tratamiento en las primeras etapas de un trastorno por consumo de sustancias es por lo común menos intenso, menos perturbador y causa menos ansiedad.
Esperar a que la gente pida ayuda es una estrategia que tiene muchos riesgos. Si se espera a que una persona pida ayuda, las personas a su alrededor pueden esperar crisis como arrestos, emergencias médicas, pérdida del trabajo, actos públicos vergonzosos e incluso la muerte.
Además, a medida que los problemas no tratados continúan, los miembros de la familia desarrollan sus propios problemas. Las parejas de las personas que tienen problemas de consumo de sustancias pueden sufrir mucho. Los síntomas comunes incluyen dolores de cabeza, dolores de espalda, problemas digestivos, depresión, ansiedad y ataques de pánico. Los hijos de padres con trastornos por consumo de sustancias pueden experimentar problemas de conducta escolar, bajo rendimiento académico y es más probable que ellos mismos luchen contra la adicción.
No es fácil vivir con alguien que está consumiendo sustancias que alteran la mente. Tomar medidas para comenzar el tratamiento y la recuperación puede ser un proceso doloroso. Sin embargo, es el único camino que promete una mejor situación. Mientras los miembros de la familia nieguen que existe un problema, el problema avanzará, lo mismo que el sufrimiento y la angustia.
Si usted siente que el problema de su amiga, amigo o pareja ya le está afectando, comience por buscar ayuda para usted mismo. Recupere su propia estabilidad emocional y trate de dar una nueva dirección y significado a su vida. Estará mejor preparado para evitar las crisis y las discusiones, además de que podrá mejorar las interacciones con la persona que está pasando por dificultades. Obtener ayuda para usted mismo puede parecer contradictorio, pero es crucial para que pueda superar eficazmente los obstáculos hacia el bienestar y la recuperación de su pareja o amigo. También podrá afrontar mejor los numerosos problemas que puedan surgir.
Algunas personas descubren que cuando buscan ayuda para sí mismas, la pareja o el amigo con adicción se molesta. Esto puede deberse quizás a que esos esfuerzos representan que la persona con problemas de consumo pierde control. Además, recibir ayuda indicaría que usted realmente quiere cambiar la situación.
Algunas personas amenazan a quienes buscan ayuda para que dejen de hacerlo. Manténgase firme en su resolución de seguir adelante y sea consciente de su seguridad personal.
Nunca es demasiado pronto para que usted o la pareja o el amigo con adicción activa busquen ayuda.
La gente suele preocuparse de que iniciar una conversación con una pareja, un familiar adulto o un amigo puede hacer que esa persona tome medidas drásticas. Por ejemplo, el ser querido puede hacer una escena delante de otras personas, mudarse de la casa, abandonar la escuela, consumir de manera excesiva, tratar de ocultar su problema o tomar represalias contra usted u otras personas cercanas.
Sin embargo, es posible que la conversación resulte en una experiencia maravillosamente productiva. Tal vez la persona simplemente no haya notado cambios en su comportamiento o no se dé cuenta de que su consumo de sustancias estaba o está causando un problema.
Si el problema sólo ha ocurrido durante poco tiempo o no ha alcanzado una etapa grave, es posible que la persona pueda reducir con éxito el consumo de alcohol u otras drogas. Si la persona no ha intentado reducir el consumo, puede sugerir esta estrategia como un primer paso. Algunas personas en las etapas de riesgo del consumo de sustancias, o incluso en la etapa inicial de la adicción, son capaces de reducir el consumo y de comenzar a consumir de manera regular cantidades mínimas.
Sin embargo, es posible que usted se dé cuenta (como ocurre a muchos) que las personas que pueden reducir el consumo son la excepción, no la regla. Muchas personas intentan reducir el consumo y descubren que no pueden, o que sólo pueden hacerlo durante unos días o unas semanas antes de volver a consumir de forma intensa o excesiva. Intentar reducir el consumo y fracasar puede ayudar a la persona a darse cuenta de que el problema es más serio de lo que se pensaba.
También puede descubrir que la persona es capaz de dejar de consumir por completo. Pero muchas personas que luchan contra la adicción han probado esta estrategia y no han podido dejar de consumir o mantener la abstinencia más que unos días o semanas. Lo ideal es que la persona sea evaluada por un profesional que pueda determinar el mejor curso de acción según la gravedad del problema y el historial médico, psicológico y social de la persona. Si siente que la persona está dispuesta a considerar que existe un problema, sugiera una evaluación o una consulta con un médico o profesional de la salud mental. Tenga en cuenta que esta sugerencia puede resultar demasiado amenazante para algunas personas durante una primera conversación.
Para hablar con otras personas que luchan con problemas similares, considere unirse a nuestras reuniones de apoyo en línea en español conducidas dos veces al mes por nuestros especialistas. Las sesiones son gratuitas y absolutamente confidenciales. Estas reuniones tienen el objetivo de ayudar a quienes se ven afectados por las drogas, el alcohol u otras adicciones. Al-Aanon, una organización basada en la estrategia de los 12 pasos, también es una forma positiva de brindar ayuda a los miembros de la familia que luchan con un problema de alcohol. Las reuniones están disponibles en español y son gratuitas. Otra alternativa son las reuniones de SMART Recovery, que son sesiones de grupos de ayuda sin carácter religioso y que se basan en la ciencia. Por el momento, las reuniones solo se ofrecen en inglés, aunque su página ofrece muchos recursos de apoyo en español.
Aunque probablemente desee detener el consumo de sustancias lo antes posible, la abstinencia inmediata de ciertas drogas tiene ciertos riesgos, incluidos los síntomas de abstinencia y las consecuencias médicas graves. Muchas personas necesitan ser internadas en un centro de desintoxicación para ayudarles con la reacción de su cuerpo al retiro de sustancias.
Incluso si la desintoxicación no es necesaria, un programa de tratamiento formal y estructurado es importante para una abstinencia sostenida. Un profesional de la salud o un consejero de consumo de sustancias puede ayudarle a usted y a la persona que lo necesita a evaluar sus opciones.
Para alentar a la persona a dejar de consumir, es posible que usted quiera decirle de qué manera estaría dispuesto a ayudarle para que el proceso sea más fácil. Por ejemplo, usted puede ofrecer ir juntos a terapia, transportarle a las sesiones o cuidar de los hijos.
Usted puede sentir que, pese a que constantemente expresa inquietudes sobre el consumo de sustancias de un ser querido, no nota ningún cambio. Es posible que haya llegado a este punto después de semanas o meses de sermonear, amenazar, ignorar comportamientos, aceptar promesas de cambio, dar segundas oportunidades o imponer consecuencias.
Los expertos recomiendan desarrollar y repetir un mensaje positivo y consistente: “Me preocupo por ti y quiero que obtengas ayuda”. Defina el consumo de sustancias como un problema para usted y para otros que se preocupan por la persona. Evite culpar, discutir y reprochar, y espere de su ser querido negación, distorsión, evasión, justificación y racionalización del problema.
Tal vez un amigo, otro miembro de la familia, un médico, un guía de su iglesia o templo, un supervisor, compañero de trabajo u otra persona importante en la vida de su ser querido podría tener una conversación efectiva. O tal vez la persona con el trastorno por consumo de sustancias responda mejor a actividades que puedan hacer juntos, como revisar folletos o videos, reunirse con un profesional o asistir a una reunión de apoyo como las que nosotros ofrecemos o alguna basada en el método de los 12 pasos.
Cuando se menciona la palabra “tratamiento” en relación con el consumo de sustancias, muchas personas piensan en centros residenciales de larga duración o en la desintoxicación. De hecho, el tratamiento incluye ambas opciones, y una variedad de alternativas.
El tratamiento aborda las condiciones físicas, psicológicas, emocionales y sociales del individuo. La reducción sostenida del consumo de alcohol u otras drogas y la mejora de la salud personal y la función social son los objetivos principales.
El tipo de tratamiento se basa en la gravedad del problema. Para las personas con riesgo de adicción activa, el tratamiento puede ser tan simple como una evaluación y una breve intervención. Para las personas que presentan signos de dependencia o adicción, una evaluación probablemente resulte en una recomendación para que la persona obtenga un nivel de atención más intensivo.
Todo tratamiento comienza con una evaluación, que es una serie de preguntas sobre la cantidad y frecuencia del consumo de alcohol u otras drogas y las consecuencias que puede estar causando. La evaluación puede ser realizada por muchos tipos de profesionales, incluido un médico en un hospital o un consultorio, una enfermera, un trabajador social clínico o un consejero de abuso de sustancias autorizado.
Después de una evaluación, algunas personas pueden necesitar una breve intervención, generalmente realizada por un profesional de la salud. Durante esa intervención, las personas reciben comentarios sobre su consumo de sustancias en función de los resultados de la evaluación. Con frecuencia, se les pide a las personas que reduzcan o dejen de consumir. Si están listas para reducir su consumo, el profesional de la salud establecerá junto con su ser querido un objetivo basado en un menor consumo. También se les puede alentar a reflexionar sobre por qué consumen y cómo cambiaría su vida al reducir su consumo. Las personas que desean dejar de consumir sustancias probablemente serán referidas a una evaluación o tratamiento adicional.
Puede pensar que necesita elegir el programa adecuado para su familiar y que, si no lo hace, el tratamiento fracasará. Pero los expertos creen que muchos programas pueden llevar al éxito si la persona está dispuesta a aceptar la ayuda de los demás y a esforzarse en alcanzar la recuperación. Un médico u otro profesional de la salud también puede ayudarlo a elegir dónde recibir tratamiento.
Para encontrar un programa de tratamiento, visite el buscador en español de servicios de tratamiento cerca de usted.
¿Su ser querido tiene alguno de los siguientes síntomas? Si es así, llame de inmediato al 911 o a otros servicios de emergencia.
Si necesita ayuda personalizada, confidencial y completamente gratuita, contacte con nuestros especialistas de la línea de ayuda. Ellos le ayudarán a diseñar un plan sobre cómo abordar el problema de consumo de sustancias de su pareja, su amigo o amiga, o familiar. Usted no está solo.